Un recipiente a presión es un contenedor cerrado herméticamente, diseñado para contener gases o líquidos a presiones diferentes al exterior. En la fabricación de estos contenedores se emplean diversas técnicas para garantizar la integridad y seguridad de la carga. Actualmente los fabricantes de estos recipientes tienen estrictas regulaciones y diferentes estándares de calidad, sobre todo por el peligro que puede significar la manipulación de este tipo de recipientes o la alteración de la carga contenida en el recipiente a presión.
Variedades de recipientes a presión
Los recipientes a presión pueden tener muchas formas, las más comunes son los cilindros, esferas y conos. Generalmente la configuración de un “cilindro largo” con tapas en sus “cabezales”, es el diseño más utilizado en el mercado. Las empresas que se encargan de fabricar este tipo de recipientes, tienen una gran variedad de modelos, ya sea estándar y diseños personalizados.
Estándares de calidad
Los recipientes a presión son fabricados utilizando diferentes métodos, los cuales siguen ciertos códigos y estándares de calidad establecidos por organismos expertos en la materia como por ejemplo la Junta Nacional de Inspectores de Calderas y Recipientes a Presión, la Directiva de Equipos a Presión de la Unión Europea o la Sociedad Americana de Ingenieros Mecánicos (ASME), todos estos son organismos que establecen normas para el diseño, fabricación e inspección de calderas y recipientes a presión.
Diferentes sectores
Los recipientes a presión son utilizados principalmente a nivel industrial, sin embargo, a veces son utilizados en proyectos privados, como por ejemplo, el almacenamiento de agua caliente o cilindros de oxígeno para la práctica del buceo. En el sector industrial, generalmente se utilizan en el almacenamiento de hidráulicos, contenedores de gases licuados o torres de destilación. Generalmente, es en el sector industrial donde este tipo de recipientes son “puestos a prueba” ya que en muchos casos, tienen que soportar altas presiones, lo cual demostrará la calidad de dichos recipientes a presión.
Fabricación y materiales
Los materiales principales que componen estos recipientes son el acero al carbono y el acero inoxidable. La técnica que se utiliza para fabricar estos recipientes, consta de la unión de piezas individuales de acero, las cuales se van “soldando” para dar forma al recipiente. Cuando se están soldando las diferentes partes de una estructura o recipiente, es importante tomar las previsiones del caso para evitar “una fuga” del material contenido, debido a este motivo, es importante conocer las propiedades del acero que se utilizará para elaborar el recipiente a presión.
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