Uno de los materiales más utilizados a nivel industrial es el metal, sobre todo en los sectores automotriz, construcción y vivienda. Uno de los problemas más comunes que suelen presentarse en estos sectores, es cuando se necesitan piezas metálicas con características específicas para un proyecto en particular, ya que no todas las empresas tienen la capacidad de fabricar piezas cumpliendo con dichas especificaciones técnicas. A continuación, conoceremos más sobre el servicio de fabricación de metales y los procesos de adición de materiales.
Fabricación de metales
El servicio de fabricación de metales es uno de los servicios más solicitados a nivel global. Para brindar este tipo de servicio, la empresa proveedora debe tener la capacidad de ejecutar todos los procesos que conforman la fabricación de metales, ya que de esta manera se podrá prestar un servicio de alta calidad (sobre todo en lo que concierne a transformación y tratamiento eficiente del metal), de esta manera se podrán obtener las piezas, productos o elementos que se necesiten en determinados proyectos. Es importante destacar que dentro del proceso de fabricación de metales se pueden llevar a cabo dos subprocesos comunes, los cuales se diferencian en la “adición” o “eliminación” de material para obtener el producto final deseado. En esta oportunidad conoceremos más sobre los procesos de adición:
Procesos de “adición de material” durante la fabricación de metales
Para cumplir con el objetivo específico de la fabricación de metales, cada uno de los subprocesos que lo conforman deben cumplir con los objetivos propuestos de manera eficiente y eficaz. En el caso de la adición de material (durante la fabricación de metales), las actividades o subprocesos como la soldadura, laminado, galvanizado y/o zincado se utilizan con el objetivo de mejorar el material durante la fabricación de metales. Cabe destacar que, para poder llevar a cabo estos subprocesos (los cuales tienen cierto grado de complejidad), la empresa debe contar con equipos y maquinarias de alta tecnología, además de tener personal calificado que cumpla con las normativas y posea las acreditaciones correspondientes.
Soldadura
La soldadura es uno de los procesos más utilizados dentro de la fabricación de metales, conforma el grupo de los procesos de adición, ya que la soldadura permite realizar la unión de dos materiales a través de la fusión, lo cual lo consigue agregando un material fundido, con el cual se logrará obtener el conocido “cordón” de soldadura.
Laminado
Durante el proceso de laminado, el metal es sometido a una deformación plástica a través de unos rodillos, los cuales están encargados de ejercer una fuerza de compresión para reducir el espesor del metal y permitir que el producto final sea más uniforme. El laminado forma parte del grupo de procesos de adición de material (durante la fabricación de metales) ya que al igual que la soldadura, se busca la mejora del material. En este caso, el objetivo principal del laminado es potenciar las propiedades mecánicas del metal, como por ejemplo, la resistencia a la tracción, el alargamiento o el límite elástico.
Galvanizado
El galvanizado consiste en la inmersión del metal o piezas metálicas en zinc fundido, obteniendo de esta manera un recubrimiento que puede variar entre 7 y 200 micras (dependiendo de la técnica utilizada para galvanizar). Este proceso forma parte del grupo de procesos de “adición de material” durante la fabricación de metales. Su objetivo principal es adicionar zinc fundido a la parte exterior de la pieza. A través de la extraordinaria adherencia del zinc, se logra una especie de “aleación metalúrgica” desarrollando una serie de capas de gran dureza, las cuales son muy resistentes a la corrosión y golpes.
Zincado
El zincado consiste en la deposición electrolítica en baños de zinc sobre el material (similar al cobreado o cromado), obteniendo de esta manera un recubrimiento que puede variar entre 5 y 20 micras (menor al galvanizado). Luego de este procedimiento se lleva a cabo un proceso de pasivado, de esta manera se incrementa la protección del material. Aun cuando el objetivo del zincado es similar al del galvanizado (proteger el material), esta protección suele ser menor y de corta duración, por lo cual es un proceso adecuado para piezas que serán utilizadas en interiores. Es importante destacar que a través del zincado se pueden obtener resultados más estéticos que con el galvanizado.
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